PLAYA DE TEBETO – FUERTEVENTURA
Una de las playas más solitarias y encantadoras del municipio de la Oliva es la Playa de Tebeto.
Esta cala de apenas un centenar de metros de longitud, está constituida de rocas y arena. La arena se cubre en los días de fuertes oleajes, y en las pleamares durante las épocas de las mareas vivas.
La playa de Tebeto se encuentra en la costa noroeste de Fuerteventura. Está situada en la desembocadura del barranco del mismo nombre, y anclada en medio de varios escarpes rocosos, conformando uno de los parajes naturales más singulares de la zona.
La mejor manera para acceder a la playa de Tebeto es hacerlo desde Tindaya. Cogiendo la pista de tierra que va hacia la playa de Jarugo, y un par de kilómetros antes de llegar a Jarugo dejaremos el vehículo, en una explanada que hay cerca de la desembocadura del barranco de Tebeto. Desde aquí, hay que descender a la playa por un pequeño sendero, que salva los pocos metros de desnivel de un escarpe.
Como casi todas las playas de la costa norte y noroeste de Fuerteventura, esta de Tebeto, también está azotada por un fuerte oleaje casi constante, y no cuenta ningún tipo de servicio, por lo que hay que tener mucho cuidado y tomar precauciones a la hora de darse un baño. Es una playa recomendable para practicar nudismo.
Si te das un paseo por la zona colindante a la playa de Tebeto, descubrirás varias preciosas y pequeñas calas, así como un horno de cal, vestigio de la industria calera, que durante siglos alivió la crisis de la economía majorera.
Como conocer y disfrutar de la playa no está reñido con lo que podamos aprender, te contaremos algunas curiosidades de la historia del Barranco de Tebeto.
PLAYA DE TEBETO – FUERTEVENTURA
Esta parte de la isla fue utilizada, desde época prehispánica para el pastoreo caprino, por los mahos que vivían cerca de Tindaya. Aquí se daban buenos pastos.
En los márgenes del barranco se encuentran estructuras de piedras hincadas, asociadas al mundo ganadero. Pertenecen tanto a la época aborigen como a fechas posteriores a la conquista, y que se han seguido utilizando hasta épocas recientes. Mencionaremos que muy cerca, en el llano de Esquinzo, hay una gambuesa donde se realizan todavía apañadas periódicamente.
En las inmediaciones de la Playa de Tebeto había un pozo de agua dulce, o más bien un reciento realizado con piedras para recoger el agua de lluvia, allí iba a saciar su sed el ganado. Estos bebederos se llaman Mismorrilla o Masmorrillas, y en ellos crecían las sanguijuelas, muy dañinas para el ganado, y para eliminarlas se ponían anguilas.
El pozo de Tebeto que era salobre, y uno de los lugares donde se pescaban las anguilas para llevarlas a otros pozos. Para ello, hacían unas bolitas con la leche de la tabaiba guisada en un caldero.
El topónimo de Tebeto ya aparece en el siglo XVII en los protocolos notariales de Fuerteventura
En Agosto de 1602
Simona Sánchez se personó ante el alcalde mayor, con la intención de pedir licencia para poder vender unas tierras y así sustentar a su familia.
Al parecer Simona Sánchez perdió gran parte de sus bienes cuando se produjo el ataque del Arraez Xabán, capturó además a su marido Juan Perdomo, y lo tuvo cautivo durante seis años hasta que murió.
Los diferentes testigos que lleva Simona Sánchez manifiestan que:
Para más información fue presentado Baltasar Peña, v°., quién ratificó lo dicho por Simona Sánchez, y confirmó que no tiene más bienes que una roza en el término de Tebetos, y otros bienes en Valhondo, y una roceta y casa en el termino de las Cuevas, y necesita venderlos.
Tebeto se llama también la revista “Anuario del Archivo Histórico Insular de Fuerteventura”, surgida a finales de los años 80 del pasado siglo, y que trata temas de gran transcendencia del ámbito majorero.
