Morros de Las Cadenas – Asentamientos prehispánicos –

Asentamientos prehispánicos – Morros de Las Cadenas

Asentamientos prehispánicos - Morros de Las Cadenas

Asentamientos prehispánicos – Morros de Las Cadenas

Los Morros de Las Cadenas es una formación geológica compuesta por 4 picachos unidos y alineados, cuyas cimas superan escasamente los 200 metros de altitud, siendo el pico más alto de 243 metros y el más bajo de 208 metros.
Esta formación es conocida como cuchilletes del Manadero, y está flanqueada en su lado sur por el barranco Cueva de la Oveja y por el norte por el barranco de Teque.  Es la zona situada entre los kilómetros 3 y 8 de la FV-413, entre el pueblo de Triquivijate y Caleta de Fuste.

En este lugar se encuentra un asentamiento prehispánico al que es recomendable acceder desde los Llanos del Bizcocho, dejando el vehículo a una cierta distancia del asentamiento.

Desde este punto tendremos una perspectiva más ámplia de las características tanto geomorfológicas y climatológicas de la zona, así como etnográficas.
Iniciando el camino desde el Llano del Bizcocho hacia el barranco Cueva de La Oveja, notamos que esta es una zona con una alta probabilidad de ser habitada por los mahos, puesto que cuenta con un cauce de barranco, que llevó abundante agua, está cerca de lugares escarpados y en su base cuenta con una gran llanura, de hecho a escasos metros están los Yacimientos arqueológicos Montaña del Sombrero y poblado prehispánico de Muley.

Nada más asomarnos desde el llano del Bizcocho hacia el barranco, se divisan unas grandes gambuesas que nos advierten que esta zona fue y sigue siendo de gran tradición pastoril.

Gambuesas en las cercanias del Barranco Cueva de la Oveja

Gambuesas en las cercanias del Barranco Cueva de la Oveja

Descendemos por el cauce del barranco hasta llegar a las coordenadas (28º 24´ 55″ N – 13º 55´ 29″ W) donde a mano izquierda nos encontramos con la desembocadura de un pequeño barranco que comenzamos a ascender.
A escasa distancia, desde una cota de 150 metros de altitud, empezamos a descubrir vestigios de los antiguos moradores de esta zona.

Los grabados rupestres que hemos encontrado, son fundamentalmente de trazados geométricos, caracterizados por ser inscripciones lineales que, o bien no forman una figura determinada, o bien presentan una elaboración más compleja, destacando ejemplos de reticulados, y líneas entrecruzadas.

Estos grabados están realizados con técnicas de ejecución incisa, unas más profundas con sección en V y otras con trazados más anchos y profundos con un surco acanalado de perfil en U, donde el trazo ha sido repasado varias veces.

Grabados rupestres de trazados geométricos

Grabados rupestres de trazados geométricos

A ambos lados del barranco se encuentran varias cuevas naturales que han sido adaptadas para ser habitadas.

Es destacable también la existencia de algunos túmulos funerarios, donde para su construcción se ha acondicionado un espacio, que previamente ha sido excavado en el suelo, y luego se ha preparado con lajas de piedra que cubren la zona excavada y enlosada con bloques que forman un recinto rectangular en donde se deposita el cadáver.

Otras de las estructuras líticas encontradas son las torretas, que jalonan el borde de la ladera. Estos amontonamientos de lascas pétreas, están levantados a base de sucesivas hiladas de lajas bien encajadas, de tipo cilíndrico y troncocónico, y cuyo tamaño varía de 0’5 m de diámetro hasta algo más de 1 m por algo más de 1m de alto.

Tanto en la zona del cauce del barranco como en los laterales, es apreciable hoy día la construcción de pequeñas presas destinadas a el encauzamiento del agua, así como el acondicionamiento de manaderos naturales a modo de pequeñas fuentes.

En esta zona se pueden encontrar, escondrijos, e incluso una piedra que pudo servir a modo de tenderedo para secar las pieles de cabra. Esto nos hace pensar que sus habitantes se dedicaban en exclusiva al cuidado del ganado caprino, sin ser un asentamiento permanente, quizás fue una zona que sirvió de refugio tanto en las estaciones donde corría agua por el barranco, como de refugio y escondite de los ataques foráneos.

Túmulos funerario

Túmulos funerario

Un poco más abajo podemos visitar otro de los asentamientos prehispánicos de la zona, como es el Yacimiento Arqueológico del Barranco de La Muley

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